jueves, 24 de abril de 2014

Acercamiento a la Alianza del Pacífico

Para una asociación completa son necesarios acuerdos con los distintos países signatarios del tratado fundacional: Colombia, Chile, México y Perú. Según el vicecanciller Federico González, la intención es progresar lo más posible en este sentido antes de la asamblea de la Alianza del Pacífico, prevista para el próximo 22 de junio.


Están programadas misiones similares a México y Chile, país este último con el que se tienen avanzadas negociaciones para arribar a un acuerdo de libre comercio.

Es acertada la iniciativa de la Cancillería y del gobierno de impulsar con la mayor energía el acercamiento a este nuevo bloque económico en el continente. Los miembros de esta organización son cuatro de las más pujantes economías del continente. Suman 215 millones de habitantes y llegan juntas a casi el 35% del Producto Interno Bruto (PIB) de Latinoamérica. Además, por su posición geográfica y en atención a los procesos económicos actualmente en curso en el mundo, la Alianza del Pacífico hará una fuerte apuesta a las relaciones con los países del Pacífico asiático y de Oceanía, como China, Japón, Singapur y Australia. Desde su misma fundación, este proyecto de integración buscó diferenciarse muy claramente del Mercosur. Para tener una idea de las diferencias en las políticas económicas de unos y otros bastará recordar que, de acuerdo con el Global Trade Alert (GTA), organización vinculada al Banco Mundial y que analiza las restricciones al comercio a escala mundial, Argentina es el país con mayores trabas proteccionistas del mundo. De acuerdo con el informe, el país vecino aplica un total de 179 distintas restricciones al ingreso de productos extranjeros a su mercado. En el continente, le siguen Brasil, con 95; Perú con 12 y Venezuela con 11. Por ejemplo, un exportador paraguayo debe superar no menos de 20 barreras paraarancelarias para introducir sus productos en el mercado argentino. En contrapartida, los argentinos se enfrentan a menos de la mitad de este número.

Este desequilibrio –que no es un fenómeno de los últimos años, sino que ya lleva décadas– contradice abiertamente el espíritu y la letra del Tratado de Asunción que fundó el Mercosur en 1991.

La disposición de la Cancillería de imprimir un ritmo más vigoroso al proceso de incorporación a la Alianza del Pacífico parece indicar que finalmente se comprende desde el sector público la necesidad de nuestro país de ampliar los horizontes de su política exterior, demasiado centrada en los países limítrofes y en relaciones tradicionales que no han reportado muchos beneficios a los paraguayos en los últimos tiempos. Una política exterior moderna y ajustada a los requerimientos de la sociedad actual no puede circunscribirse a los vecinos, sino que tiene el imperativo de expandirse más allá de las fronteras, de las regiones, de los continentes. Paraguay tiene que perder el miedo y abrirse a todas las posibilidades en el campo de las relaciones internacionales, los acuerdos comerciales y todo tipo de alianzas en el mundo.

Mientras la relación de nuestro país con el mundo no tenga la categoría de una política de Estado estaremos condenados a ser el furgón de cola de los planes de otras naciones.

http://www.lanacion.com.py/articulo/162922-acercamiento-a-la-alianza-del-pacifico.html

UNA ¡defiéndete!

El senador Juan Carlos Galaverna quiere que el Dr. Froilán Enrique Peralta sea el próximo rector de la Universidad Nacional de Asunción (UNA). Para el efecto, está tratando de influir en los 62 miembros de la Asamblea Universitaria, hasta el punto de ofrecerles cargos y beneficios en la administración pública, según denunció el Centro de Estudiantes de la Facultad de Economía.

Su protegido –decano de la Facultad de Ciencias Veterinarias– había integrado la lista de candidatos que él encabezó en las últimas elecciones internas de la ANR. Si el legislador lograra su objetivo, estaría marcando todo un hito en la decadencia de la primera universidad del país.

Bajo la dictadura, el rector era nombrado por el Poder Ejecutivo; ahora resulta que, en democracia, sería digitado indirectamente por un miembro del Poder Legislativo. También en este último caso, la autonomía universitaria, que busca preservar a la institución de los poderes políticos, brillaría por su ausencia, con el agravante de que la injerencia no apuntaría a someter a la universidad a un órgano estatal o incluso partidario, sino a los caprichos de un simple dirigente político.

No es la primera vez, por cierto, que el senador aparece vinculado a la política universitaria, ya que es notoria su ligazón política con el decano de la Facultad de Ciencias Médicas, Aníbal Peris, quien también había figurado en la lista de candidatos antes citada. El legislador, que se precia de ser un “bachiller campaña”, no es miembro de la comisión senatorial de Cultura, Educación, Culto y Deportes.

Cabe preguntarse, entonces, por qué tiene tanto interés en la educación terciaria. Como debe presumirse la inocencia, incluso la de quien confesó haber cometido alguna vez un escandaloso fraude electoral, podría decirse que le mueve el deseo de que la UNA realmente cumpla con sus altos fines mediante una mejor administración de su presupuesto, que este año llega a más de 270 millones de dólares. Si así fuera, no habría nada que reprocharle, pues existe un interés general en que los estudiantes reciban una formación adecuada y en que el dinero público sea bien gestionado. El inconveniente de su actual intervención radica en que ella es improcedente porque ningún estamento universitario lo tiene entre sus miembros. Su eventual deseo de que la UNA mejore en todo sentido no le autoriza a intervenir en la elección de sus autoridades ni su condición de legislador le habilita a obtener votos para su candidato a cambio de prebendas. Desde luego, su presunta preocupación por el buen manejo del dinero público –compartida por todos los ciudadanos– no debería llegar al extremo de sugerir el nombre de quien sería director general de Administración y Finanzas de la universidad, en el caso de que su protegido triunfe. Se ha denunciado que se trataría de Víctor Bernal, exsenador sospechado de enriquecimiento ilícito cuando fue director general de Itaipú Binacional y también integrante de la lista de candidatos del movimiento Compañeros Colorados en las elecciones internas. Acaso resulte obvio apuntar que la designación debe hacerla el rector sin tener en cuenta “recomendaciones” extrañas, pero se hallan tan confundidos los ámbitos que no está de más insistir en la autonomía universitaria. Sirva de ejemplo el caso de la Universidad Nacional de Pilar, cuyo rector es el diputado Víctor Ríos.

No sería raro que Juan Carlos Galaverna se haya convencido de que si otro legislador funge de rector, él bien podría influir al menos en la elección de otro. El senador habló en el plenario de la Cámara de los pésimos manejos dinerarios, por decirlo así, del referido diputado-rector. Allí estuvo en su derecho, pero no así cuando, extralimitándose, incursiona en campos que le están vedados. El caso de Víctor Ríos no puede servirle de excusa, sino más bien de motivo para exigir que no se ejerzan a la vez un cargo electivo y otro administrativo.

Que ya no se trate solo de someter a la UNA a los designios de un poder del Estado o de un partido, sino hasta a los de un dirigente político en particular, es un signo elocuente del profundo deterioro de la enseñanza universitaria, que no depende necesariamente de los fondos presupuestados, sino sobre todo de la calidad moral e intelectual de sus autoridades, profesores y estudiantes. Si se impusiera el candidato del senador, habría razones fundadas para creer que la integridad de los miembros de la asamblea de la UNA es francamente cuestionable. En verdad, ya sería el colmo que su elección sirva para apoyar la candidatura del senador a la presidencia de su partido, como sospechan los seguidores de la senadora Lilian Samaniego.

La UNA conoció tiempos mejores y no porque sus presupuestos eran más elevados, sino porque sus estamentos tenían dignidad. Confiamos en que al final prevalezca, pese a todo, el pundonor de quienes elegirán al rector. Por su parte, los estudiantes, que son los directamente beneficiados o perjudicados si el rector de su universidad así como los decanos y profesores son o no personas capaces y probas, deberían estar atentos para evitar que políticos inescrupulosos metan sus hocicos en el centro educativo donde se están formando.

http://www.abc.com.py/edicion-impresa/editorial/una-1238105.html

martes, 22 de abril de 2014

¡Un puente, por favor!

Ingenuamente –debo admitirlo– pensé que tras el vía crucis padecido por miles de compatriotas y turistas los días previos a la Semana Santa con la inhabilitación del puente San Ignacio de Loyola, las autoridades paraguayas aprovecharían la venida del canciller argentino al país, Héctor Timerman, para concretar la construcción de otro  con la nación vecina.

Lastimosamente no fue así (por lo menos hasta la hora de redactarse estas líneas).

Indudablemente, los gobiernos ven las cosas diametralmente opuestas a cómo las vemos los comunes mortales como usted o como yo. Y hablo de gobiernos, en plural, porque el puente del que hablamos lleva más de cincuenta años, fue construido “provisoriamente” por

militares; ergo, desde entonces a ni una sola de las administraciones que pasaron les importó hacerlo definitivo o erigir otro más.

En pleno siglo XXI y siendo tan mediterráneos como lo somos –no solo física, sino también mentalmente– es inadmisible que sigamos comunicándonos y dependiendo de tres “puentecitos de morondanga” (el de Ciudad del Este-Foz de Yguazú; Encarnación-Posadas, y el de Puerto Falcón-Clorinda).

Como miles de compatriotas y no compatriotas, fui víctima de aquel imponderable (inhabilitación del puente por 24 horas, luego de constatarse fisuras en su estructura) y al ver los kilómetros de camiones de gran porte y automóviles varados, me costaba aceptar lo profundamente atrasados que estamos, como nación, como sociedad, como Estado.

Me supongo que ese corte habrá representado millones en retrasos, sin olvidar la bofetada que significa para el ciudadano ver que sus autoridades poco o nada están haciendo por cambiar este estado de cosas (fuentes de Obras Públicas aseguran que ni siquiera un borrador de proyecto existe para construir otro puente que nos una a la Argentina).

Se estima que en fechas especiales como las previas a o pos Semana Santa, más de 5.000 vehículos por día pasan por el puente San Ignacio de Loyola. Sin contar, obviamente, los grandes camiones transportadores de granos y otros.

A la Argentina, el tema le es intrascendente.

El problema es del Paraguay; por lo tanto, la solución debe ser planteada por nuestras autoridades.

El país necesita, urgentemente, más y más obras, y entre estas por supuesto puentes que nos ayuden a romper definitivamente con el aislamiento y por tanto con el atraso.

Que tenga una buena jornada.

Por Gloria B. Rolón L.

lunes, 21 de abril de 2014

Paraguay necesita diplomáticos cualificados.

Un país pequeño como el nuestro, de desarrollo económico relativo y con la limitación adicional de ser un país geográficamente enclaustrado por su mediterraneidad, requiere de un servicio diplomático sumamente competitivo, integrado por profesionales con una alta cualificación intelectual y probidad ética, capaces de moverse con soltura en el mundo y negociar condiciones ventajosas de inserción nacional en la comunidad internacional. Para ello, es menester que la Cancillería continúe afinando los mecanismos de selección de nuevos integrantes de su escalafón y permanente actualización de los ya existentes.

Hasta hace quince años, cuando el Congreso sancionó, y el Poder Ejecutivo promulgó, la Ley 1335/99, del Servicio Diplomático y Consular de la República del Paraguay, nuestro país no contaba con una carrera diplomática equiparable a la ya existente en otros países de la región. Nuestros principales cuadros diplomáticos estaban mayormente integrados por familiares y allegados de ex altos funcionarios del Estado, en particular hijos, sobrinos o nietos de importantes jerarcas de la dictadura stronista.

Ya en épocas de la apertura política, iniciada en febrero de 1989, el clientelismo político también se hizo sentir en las filas del Ministerio de Relaciones Exteriores, que agregó a los funcionarios heredados del régimen autoritario otros tantos empleados apadrinados por los dirigentes bien vinculados con los diferentes gobiernos de turno.

Así las cosas, la primera tarea emprendida por los diferentes cancilleres, a partir de la ley del escalafón, estuvo relacionada con una suerte de blanqueo de los cuadros de diplomáticos existentes a la fecha de la aprobación de la norma. De allí provino, seguramente, el conocido aforismo de que el Paraguay no tenía diplomáticos de carrera, sino diplomáticos a la carrera, es decir, improvisados o bien probados únicamente en la fragua de la experiencia.

Algunos años más tarde, ya bajo la administración del ex presidente Lugo, se convocó a concursos públicos de oposición y méritos para ingresar a la última categoría del escalafón (tercer secretario), tal como lo prescribe el artículo 7º de la Ley 1335/99. En rigor, ese fue el verdadero comienzo de la carrera diplomática profesional en el Paraguay.

La semana pasada, la Cancillería anunció la organización de exámenes de oposición durante el mes de junio, a fin de categorizar a funcionarios permanentes de la institución en su escalafón administrativo. Posteriormente se realizará una convocatoria pública, a fin de que puedan participar en la misma todos los interesados en ocupar puestos en Relaciones Exteriores. La iniciativa, pues, es digna de ser destacada.

Un país pequeño como el nuestro, de desarrollo económico relativo y con la limitación adicional de ser un país geográficamente enclaustrado, requiere de un servicio diplomático sumamente competitivo, integrado por profesionales con una alta cualificación intelectual y probidad ética, capaces de moverse con soltura en el mundo –con dominio de lenguas extranjeras– y negociar condiciones ventajosas de inserción nacional en la comunidad internacional.

Para lograrlo, es menester que la Cancillería rechace toda forma de prebendarismo en la integración de sus cuadros, y que afine los mecanismos destinados a asegurar que el Paraguay cuente con un servicio exterior de excelencia, compuesto por diplomáticos que ejerzan una digna representación nacional a lo largo y ancho del mundo.

martes, 15 de abril de 2014

Evo Morales presenta memorial ante La Haya

El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha llegado a los Países Bajos para presentar ante La Haya la memoria judicial contra Chile. Bolivia exige que se lleve a cabo una negociación con el país vecino para tener salida al mar.

Ningún Estado en el mundo debería estar privado del acceso soberano al mar. Con esta convicción el presidente de Bolivia, Evo Morales, respalda la demanda que su país presenta contra Chile ante el tribunal de La Haya, con el fin de que emita un fallo que obligue a negociar una salida independiente al océano Pacífico para la nación andina. Este será un nuevo capítulo en la larga disputa que sostienen los dos países desde hace más de 130 años. 

Bolivia tiene legítimo derecho a presentar su demanda.
Desde el término de la Guerra del Pacífico, en 1884, Bolivia, Perú y Chile han estado implicados en disputas territoriales que llegan hasta nuestros días. De ellas, la más grave es la reclamación de La Paz a Santiago por el acceso soberano a las costas, del cual se le privó en 1904 con la firma bilateral del Tratado de Paz y Amistad. 

El documento estableció la concesión por parte de Bolivia de 400 kilómetros de costa al océano Pacífico y 120.000 kilómetros cuadrados de tierras.  

Pero el tratado también estipula que en caso de diferencias sobre su ejecución, sería posible recurrir ante la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya. Decisión por la cual se ha decantado el presidente Morales, luego de que cada intento de diálogo iniciado con el hoy expresidente chileno, Sebastián Piñera, acabara sin resultados favorables para su país. 

"Me parece que Bolivia tiene legítimo derecho a presentar su demanda en este tribunal", dice el analista político Salvador Muñoz, pero subraya que quizá este tema se pueda resolver bilateralmente. 


Texto completo en: http://actualidad.rt.com/actualidad/view/125359-morales-bolivia-chile-haya-mar

Roban un mechón de cabello de Napoleón

Un mechón de cabello de Napoleón y otros "valiosos" objetos fueron robados de un museo australiano, que cuenta con una colección reunida por allegados del emperador francés cuando estaba exiliado en la isla de Santa Elena, informó este martes la Policía, citada por los medios locales.
El museo alberga una colección de uno de los primeros colonos ingleses de Australia, cuya familia se había hecho amiga de Napoleón antes de su muerte en la isla de Santa Elena.

El museo se encuentra en la hacienda The Briars, al sur de Melbourne.  

Crimea después del referéndum

La península de Crimea, que sirvió de balneario popular y de base principal de la Flota del mar Negro durante la época de la Unión Soviética, había tenido una larga historia de autonomía bajo el nombre de Kanato de Crimea (vasallo del Imperio otomano) y de Táurida. Se unió a Rusia en al menos tres ocasiones y en ninguna se separó por voluntad de sus propias autoridades. La transferencia de Crimea a Ucrania fue una decisión tomada en 1954 por el primer secretario del Partido Comunista de la URSS Nikita Jruschov. 
En 2014, después de la revuelta del 'Euromaidán', la oposición armada alejó del poder al presidente legítimo de Ucrania, disolvió al Tribunal Constitucional y revocó la ley que otorgaba a Crimea y otras regiones usar la lengua rusa como oficial, pero las autoridades territoriales no obedecieron esos actos de Kiev por falta de legitimidad. El cálculo de los votos tras el referéndum de este 16 de marzo reveló la voluntad del 96,77% de la población de la repúblicaautónoma a reintegrarse en la Federación de Rusia. El 18 de marzo se firmó en Moscú el histórico acuerdo de reunificación de la República de Crimea y la ciudad de Sebastopol con la Federación de Rusia.